La debilidad de Rusia por todo lo europeo se extiende también a la cocina. Muchos platos se describen como franceses, checos o finlandeses, incluso si el vínculo para realizar tal afirmación es tenue, por decir algo.
Si pides esto en la República Checa, te traerán un plato de carne de cerdo con bolas de masa. Pero en Rusia, un pastel relleno checo significa un bizcocho de chocolate con suave crema de chocolate en su interior. Fue creado en el legendario restaurante Praga de Moscú en la época soviética, junto con postres como el pastel Wenceslao, el Leche de Pájaro y, por supuesto, el pastel Praga. Mucha gente todavía los recuerda con nostalgia y los considera como los mejores postres soviéticos. Hoy en día, estos pasteles no sólo se encuentran en las secciones de confitería de las tiendas y cafeterías ordinarias, sino también en muchos bufetes de teatros.
En Rusia, hay dos pasteles que llevan el nombre de ciudades polacas. El Krákovskoie (Cracovia) es un postre rectangular elaborado a partir de una masa de corteza corta coronada con merengue de almendra, y el Varshávskoie (Varsovia) es un pastel de tres capas: una de pan de mantequilla, otra de frutos secos y una capa de fruta en medio. Estos pasteles aparecieron por primera vez en la URSS a mediados de la década de 1950 y se no se consideraban algo raro. En Polonia, sin embargo, te costará encontrar un pastel así. Los polacos consideran que su postre tradicional es el Kremowka, otro pastel a base de masa quebrada, pero con natilla y azúcar en polvo.
¿Quieres sorprender a un amigo francés? Háblale de este plato. Mejor aún, dáselo aprobar. La “carne a la francesa” rusa no tiene nada que ver con el escalope o entrecot francés. En Rusia, es un trozo de carne de cerdo (o, menos a menudo, de ternera) asada al horno con tomates, mayonesa y queso rallado. ¡Un verdadero clásico en cualquier ocasión! Es similar a la ternera Orloff, un plato muy conocido en el extranjero, sólo que sin setas ni patatas (aunque estas se pueden añadir para un sabor más completo). Se cree que fue inventado por un chef francés al servicio del conde Alexéi Orloff a principios del siglo XIX, con la receta siendo ligeramente modificada durante los años soviéticos para crear un plato verdaderamente “popular”.
Viena es la capital mundial del café, con una plétora de opciones, aunque la preparación Wiener Melange local se considera algo tradicional. Una parte de leche espumosa caliente, una parte de espresso, a menudo se sirve con crema batida sin azúcar. Aunque muchos cafés en Rusia ofrecen “café vienés”, estos tiene poco parecido con el original, y las recetas del mismo varían ampliamente. La base puede ser café americano o espresso, o incluso café con leche, espolvoreado con chocolate y cubierto con diferentes tipos de crema batida, la mayoría de ellos dulce.
Después de los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980, empezaron a aparecer en la Unión Soviética algunos productos extranjeros del mundo capitalista. Uno de ellos fue el salami finlandés, que se ganó tantos corazones y estómagos soviéticos que se decidió producirlo en la URSS. Sin embargo, en lugar de salami, la variante soviética resulto siendo un tipo de salchicha ahumada. En general, la prosperidad de una familia soviética se podía medir por el tipo de embutido que había en el refrigerador. La salchicha “finlandesa” era un producto increíblemente escaso y un indicador de bienestar. Y no todo era una cuestión de costo, pues también influía el que aparecía en las tiendas con poca frecuencia y no fuese de acceso universal. Si alguien se las arreglaba para conseguirla, por lo general lo guardaba para ocasiones especiales y agasajar a sus invitados. Hoy en día, todavía se produce en Rusia según la misma receta: carne, grasa, magro de cerdo a partes iguales y especias.
Pincha aquí para leer sobre la mortadela del doctor (no, no te asustes, era un embutido soviético).
La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: