El perrito caliente soviético, o “sosiska v teste”, son una especie de aperitivos hechos de masa y horneados. Se hicieron populares en la época de Jrushchov, en los años 50-60, después de que el líder del país visitara EE UU. Durante aquella visita, además de interesarse por el maíz, hacer innovaciones generales en la producción en masa y en las tiendas de autoservicio, Jruschov también tomó prestada la tecnología de la industria cárnica y ciertas ideas sobre comida rápida. Se suponía que gracias a ellos haría que los productos cárnicos fueran más asequibles para el pueblo soviético.
De hecho, antes de esa visita en la “biblia de la cocina soviética”, el llamado Libro de la comida sabrosa y saludable, solo se mencionaban las salchichas dos veces: salchichas fritas servidas con puré de patatas, y salchichas en latas de conserva. Las generaciones de mis abuelos y mis padres en la década de 1970 las usaron más a menudo, aunque seguían siendo caras. No fue hasta la década de los 90 que se generalizaron los perritos calientes, debido a la privatización y a la aparición de pequeños cafés para llevar.
Obviamente hoy en día se pueden comprar en cualquier lugar. Sin embargo, los que hago en casa para mis hijos son siempre especiales y más saludables; al menos, eso es lo que creo. ¡Trata de cocinarlos también!
Ingredientes:
Elaboración:
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