Esta serie de televisión es una mezcla loca de géneros: misterio, fantasía, drama, thriller, road-movie, acción, desastre e incluso melodrama. Sucede en la actualidad, cuando cinco moscovitas persiguen a un ladrón que robó todo su dinero y que, sorprendentemente, huye a... ¡Prípiat! Para salvar sus vidas, estos amigos se ven obligados a luchar contra monstruos, extraños peligrosos y muertos vivientes. Incluso viajan en el tiempo para cambiar el curso de la historia. En una de las realidades alternativas de la serie, visitaran los llamados Estados Separados de América, una versión de Estados Unidos pero desgarrados por la guerra civil tras un desastre nuclear similar al de Chernóbil ocurrido en la Central Nuclear de Calvert Cliffs.
En esta miniserie ucraniana, el horror no es creado por monstruos, sino por la realidad de lo que ocurrió en Chernóbil. Cuenta la historia de amor de dos adolescentes, Pasha y Alia, que se encuentran en Prípiat en vísperas de la catástrofe. No tienen idea de la pesadilla que están a punto de vivir. Esta producción fue recibida calurosamente tanto por la crítica como por el público. Y la alta calificación recibida en IMDB (8,1) habla por sí misma.
No esperes de esta serie un drama poderoso o un análisis escrupuloso de los acontecimientos ocurridos en la central nuclear de Chernóbil. Esta película tiene un solo objetivo: entretenerte y asustarte con innumerables gritos, sangre, llantos, monstruos y horribles experimentos militares. Esta es una película típica para acompañar con palomitas de maíz, nada memorable, bastante lejos de ser una obra maestra, pero tampoco es una basura.
La pregunta que le surge a uno es… ¿Qué tiene John McClane que ver con el desastre de Chernóbil? Mucho, de hecho. Esta, que no es la mejor entrega de la franquicia, envía a Bruce Willis primero a Moscú y luego a la planta nuclear de Chernóbil. Allí observamos cómo McClane se enfrenta a un ejército de villanos y huye del fuego de los helicópteros de combate rusos.
Al igual que Inseparables, este drama franco-ucraniano se concentra en la tragedia de una persona que se encuentra en el centro del desastre. Ania, interpretada por la chica Bond Olga Kurilenko, se queda viuda el día de su boda, el 26 de abril de 1986, el mismo día en que explota el cuarto reactor de Chernóbil. A partir de entonces, deberá reunir todas sus fuerzas para seguir viviendo...
Esta película tiene una gran diferencia con respecto a otras sobre la famosa tragedia nuclear. Algunas de sus escenas fueron filmadas en la zona de exclusión de Chernóbil, bajo la estrecha vigilancia del Ministerio de Situaciones de Emergencia de Ucrania.
La película reconstruye el primer día en Prípiat tras el accidente de la central nuclear. Mientras que la verdad sobre lo ocurrido se oculta a los ciudadanos para evitar el pánico, Valeri Kabish se entera de la catástrofe. Agarra a su novia y amigos y huye por la tranquila ciudad para escapar. El film recibió críticas mixtas de críticos y público. A pesar de haber ganado varios festivales internacionales, los espectadores no quedaron demasiado impresionados. “Los diálogos son absolutamente incomprensibles” y “un lío narrativo total” fueron sólo un par de los comentarios recibidos. El trabajo de sus protagonistas, sin embargo, fue muy elogiado.
Envejecidos héroes del cine de acción de los años 80, Dolph Lundgren y Jean-Claude Van Damme repiten los papeles que muchos años antes les dieron gloria. Luc Deveraux, interpretado por JCVD, viaja a la planta nuclear de Chernóbil, que ha sido ocupada por terroristas que tienen como rehenes a los hijos del primer ministro ucraniano. Ni que decir tiene que se desata el infierno... La película es recomendable sólo para los fans más devotos de los dos famosos actores.
Esta película no es para los duros de corazón. Los que han visto este drama ucraniano dicen que es imposible hacerlo sin derramar una lágrima. Una niña recibe una gran dosis de radiación durante el incidente de Chernóbil. Su única oportunidad para sobrevivir es llegar a EE UU para recibir un caro tratamiento. Y cuando parece que no queda esperanza, Aurora tiene un encuentro casual con el famoso bailarín Nik Astájov que, literalmente, le salva la vida.
Cuando se habla de Chernóbil en el cine, la gente tiende a imaginar una película de desastres o, al menos, de terror. Pero los cineastas soviéticos lograron enmarcar en el desastre nuclear una historia de detectives. Filmada en 1990, Lobos en la Zona nos cuenta cómo la zona de exclusión se convirtió en el blanco de hordas de merodeadores, en busca de objetos personales abandonados, equipo e incluso joyas. Mientras actúan, las autoridades locales y la policía hacen la vista gorda. Pero siempre surge un héroe. El único que puede detener este caos es el excapitán de policía Rodiónov.
En cierto modo, esta producción ruso-británico-estadounidense puede ser considerada la predecesora de la serie de televisión de HBO. También proporciona una cronología detallada de los eventos, pero se centra en la actividad de los médicos estadounidenses y británicos que ayudaron a los heridos. La película se basa en las memorias de uno de estos médicos (Robert Peter Gale) y cuenta con las estrellas John Voight y Jason Robards.
¿Quién era Valeri Legásov, el científico soviético que salvó al mundo de Chernóbil? Pincha aquí para saberlo.
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