El Ejército ruso utilizó todo su arsenal para cambiar el resultado de la guerra siria allá por 2015. Analizamos de cerca los tres más destacados.
Tu-160 “Cisne Blanco”
Se trata del avión supersónico más grande y potente de la historia de la aviación militar. También es el bombardero más rápido en servicio, apodado “Cisne Blanco” por los aviadores debido a su aspecto.
Cada “Cisne Blanco” puede transportar hasta 45 toneladas de bombas y misiles. En comparación, sus análogos extranjeros directos “solo” pueden llevar un máximo de 34 toneladas de munición (B-2: 27 toneladas, B-1: 34 toneladas, B-52: 22 toneladas).
El avión también tiene los motores más potentes de su clase de bombarderos estratégicos que le permiten acelerar hasta 2.300 km/h. Esta es también una cifra récord para los bombarderos estratégicos.
Por primera vez, estos aviones fueron utilizados en batallas durante la campaña rusa en Siria. A finales de 2015, realizaron ataques con misiles de crucero X-555 contra infraestructuras del Estado Islámico.
“El ataque tenía un objetivo tanto simbólico como militar. En el primer caso, teníamos que mostrar al mundo las capacidades de nuestra aviación estratégica. Y en segundo lugar, teníamos que disminuir drásticamente las fuerzas del ISIS en tierra, así como ver cómo se comporta el Tu-160 en circunstancias reales de batalla en vuelos de larga duración”, afirma Viktor Murajoski, redactor jefe de la revista Arsenal de la Patria.
Las Fuerzas Aéreas rusas disponen actualmente de 16 Tu-160 y Tu-160M1. En el marco del programa estatal de armamento para 2018-2025, está previsto actualizarlos a la versión M2, en la que recibirán nuevos sistemas informáticos y de a bordo, un nuevo sistema de navegación protegido, nuevos medios de guerra radioelectrónica para proteger al avión y sus misiles del “cegamiento”, así como armas guiadas y no guiadas de nueva era.
Lanzallamas pesado TOS-1A
El sistema de lanzallamas pesado TOS-1A es capaz de infligir daños comparables a las consecuencias de un ataque nuclear táctico. La descarga de este complejo radioquímico destruye todo lo que hay en un área de hasta 40.000 metros cuadrados, haciendo imposible esconderse incluso en refugios subterráneos.
“Es uno de los sistemas de armas más mortíferos que tiene el ejército. Se utilizan en operaciones especiales, cuando las unidades necesitan desplegarse rápidamente en un lugar y quemar hasta los cimientos una base mal protegida con tiendas de campaña, vehículos blindados, etc. El objetivo ideal es un campamento de campaña, posiciones de combate fortificadas en las montañas o una columna de vehículos enemigos con cazas a bordo”, dice Murajovski.
La versión mejorada del TOS-1A tiene 24 cohetes. Puede disparar un solo tiro y dos tiros de dos cañones a los objetivos. La duración de la salva completa para los disparos gemelos es de seis segundos, para los disparos simples, 12 segundos. El tiempo de preparación para abrir fuego es de 90 segundos.
El sistema está diseñado para destruir vehículos blindados ligeros, incendiar estructuras y edificios y destruir tropas enemigas con fragmentos y ondas de fuego de cohetes de 220 mm con munición termobárica y de ignición de humo. El alcance de fuego de un TOS-1A es de hasta 6 km.
Fusil de asalto submarino APS-5
El APS-5 (el nombre es una abreviatura de “rifle de asalto submarino” en ruso) es un arma submarina utilizada por la Armada rusa. Fue creado en 1975, pero fue desclasificado y presentado al público sólo después del colapso de la Unión Soviética, durante la exposición militar internacional anual en Abu-Dhabi.
“Fue y sigue siendo utilizado por los marinos rusos para proteger los barcos militares y comerciales en el puerto sirio de Tartús”, dice Murajovski.
En circunstancias de combate, un APS-5 es capaz de alcanzar un objetivo a una distancia de 30 metros a una profundidad de cinco metros. Al mismo tiempo, el alcance del disparo depende de la profundidad de inmersión. A una profundidad de 40 metros, puede alcanzar un objetivo a sólo diez metros de distancia.
El arma fue diseñada inicialmente para eliminar a los saboteadores y espías submarinos de un enemigo potencial. Se utiliza principalmente para defender a los barcos y submarinos en los muelles de los enemigos dispuestos a plantar una bomba bajo el fondo de un barco. También puede ser utilizado por los oficiales para protegerse de los depredadores submarinos, como los tiburones.
El APS-5 puede dispararse tanto en modo individual como en modo automático. También puede utilizarse en la superficie, pero no es muy eficaz, ya que el alcance del fuego no supera los 100 metros. Este contratiempo obligó a dotar a las unidades de nadadores de combate de dos fusiles de asalto: un APS y un AK, por si surgía la necesidad de combatir a los enemigos en tierra.
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